Iron League

Nombre: Iron League

Diseñador: Julio Ignacio González y Luis Almudévar

Editado por: Juegorama S.C.

Jugadores: 2 - 6

Edad: 8+

Tiempo: 60´

Dependencia idiomática: Sí
Fundas: Si. Necesitarás 56 Fundas USA (56 mm X 87 mm) (100 uds) en Zacatrus

Dónde comprarlo: Tienda de Iron League 

Año 2100, la industria mundial ha abandonado toda esperanza de paz y ha centrado su economía en las máquinas de guerra llamadas Irons, los países compiten por tener los mejores equipos y los laboratorios ensayan las armas más potentes y destructivas, mientras se busca a los mejores pilotos.

Tenemos ante nosotros un futuro distópico donde se realiza una competición deportiva entre equipos de robots gigantes llamados "Irons", éstos tratarán de meter la bola de plasma en la meta consiguiendo puntos que decidirán al vencedor. Sin embargo, no se trata solamente de un inocente partido de baloncesto, pues los golpes y el fuego cruzado se sucederán dañando a estas máquinas de alta ingeniería. Sólo el más capaz y con una voluntad de hierro podrá triunfar en Iron League.

La mecánica se desarrolla por turnos donde tendremos dos acciones para realizar con cada Iron. Todas las opciones tendrán un funcionamiento muy sencillo y fácil de aprender. Cada robot podrá: mover 1 o 2 casillas, atacar con una de sus armas, el daño y el efecto producido dependerán del arma. También podrán levantarse cuando por un disparo o múltiples daños caigan al suelo, pasar la bola de plasma a un compañero de equipo o tratar de robarla de las manos de un contrincante. Estas constantes serán alteradas por las cartas que desvelaremos y añadiremos a nuestra mano cada vez que nos toque: por un lado estarán los sucesos, que incluyen muchas situaciones tanto beneficiosas como perjudiciales que simulan la influencia del púbico, averías o todo tipo de situaciones singulares. Por otro lado, tendremos las cartas de acción, las cuales usaremos para modificar nuestros Irons, repetir tiradas, o boicotear al enemigo. A lo largo de la partida, iremos consiguiendo puntos de victoria: ya sea destruyendo a los enemigos, introduciendo el balón de plasma en la meta o golpeando con el balón a otros Irons como si fuera un arma. La partida finaliza cuando alguien consigue 26.



Las tiradas de dados dominarán los turnos al igual que la azarosa aparición de las cartas, provocando emoción y suspense ante lo desconocido, pudiendo dar la vuelta a una ronda en el último momento. Este azar será tenido en cuenta y formará parte de tu estrategia sorprendiéndote cuando menos te lo esperes. Un singular y sencillo sistema de dados que está bastante equilibrado.

El rango de jugadores es bastante amplio, permite tantos como robots incluye. Sin embargo, está pensado especialmente para dos. Una lucha turnándose los roles de atacante y defensor. Conforme aumentamos el número, surgen problemas. Para tres, el campo de batalla se queda asimétrico proporcionando ventajas según la posición elegida. Para cuatro o más, los equipos desaparecen y cada individuo maneja un Iron. Esta batalla campal proporcionará un sistema más equilibrado pero a la vez aleatorio, puesto que no tienes capacidad de reacción en caso de un suceso negativo y serás eliminado de la ronda si tu robot resulta excesivamente dañado.

El tiempo requerido será aproximadamente unos 60 minutos, aunque puede alargarse hasta los 90' si hay que explicarlo por primera vez. Pero nunca más de eso porque las rondas acaban al meter un gol, lo que ocurrirá infaliblemente, ya sea porque un robot llegue corriendo o por que un equipo haya destruido al rival subiendo el marcador de forma drástica terminando la partida en tres o cuatro rondas.

Las reglas son cortas y sencillas, pensadas para llegar a un público de todas las edades. Se nota que son la primera versión porque hay muchas lagunas y excepciones sin aclarar. Aun así, se entiende la base del juego y te puedes lanzar a por la primera partida después de leerlas por primera vez. Su grafismo no es demasiado acertado, algo tan importante como el libro de reglas que sabes todo el mundo leerá merece más atención y cuidado. A lo largo de nuestras partidas han ido surgiendo estos vacíos legales que solventamos aplicando el sentido común, para luego consultar con los creadores. Os dejo el link con una recopilación de las preguntas que me han surgido respondidas por los diseñadores. Hay que reconocer la lógica en su sistema, de todas las interpretaciones por nuestra parte hemos errado en pocas con respecto a la versión oficial. 

Los materiales se separan en dos vertientes, por una parte nos encontramos las portentosas figuras de los robots realizadas con unos rasgos y calidades excelentes. Así como, las fichas y los dados personalizados, incluso la portada sintetiza la esencia del juego en una imagen espectacular. Sin embargo, hay otros elementos con un nivel de calidad inferior: el tablero separado en tres piezas e impreso en un cartón poco rígido cuyo fondo es anecdótico y no tiene relevancia alguna, al igual que las fichas de los Irons y la hoja resumen con las puntuaciones que son simples papeles sin nada que llame la atención. Conforme lo pruebes notarás varias incongruencias, elementos que no han sido planificados y enturbiarán la presentación visual. Por ejemplo, los marcadores de puntuación son mayores que los iconos donde hay que colocarlos, o los tokens de los pilotos entorpecen el normal funcionamiento cayéndose de la peana. A las cartas también les pasará algo parecido, las ilustraciones están geniales y recuerdan a los dibujos animados de antaño, pero al tener los bordes puntiagudos se deteriorarán con el tiempo. La emoción que se desprende al enseñar las piezas de los robots se empaña al colocar el resto de elementos. Visitad el Unboxing para ver el contenido de la caja y haceros una idea más aproximada.



El precio ronda los nada desdeñables 40€, cómo habéis podido comprobar la caja es grande y a duras penas cabe todo dentro. No obstante, la portada de la caja promete un nivel que sólo alcanzan los robots. En resumen, estás pagando sobre todo por los Irons. Un poco caro, pero asumible si disfrutas con ellos tanto como un servidor.

Iron League tiene un gran potencial, llevo toda una semana pensando modos de personalizarlo y darle un toque único: desde el desarrollo de nuevas reglas manteniendo la mecánica básica que permitan otros modos de juego, hasta el posible diseño del fondo de nuevos tableros que conviertan cada partida en algo épico. Estoy convencido de que gustará a un grupo muy heterogéneo de personas porque sus reglas son fácilmente asimilables, permitiendo entenderlas y exprimirlas desde el primer momento. Aunque, por el tema no considero que sea del todo accesible. Que sus protagonistas sean unos muñecos de un tamaño considerable añade el elemento amable y sentimental que hará las delicias de niños y mayores. A la hora de puntuarlo he tenido en cuenta estos factores y le he otorgado una nota un punto por encima de la que merece objetivamente, pensando en aquello que puede llegar a ser con unos arreglos. Así que, obtiene en mi escala personal un condicional:

Recomendado a todos aquellos que disfruten jugando, ya sea con tableros y cartas o con figuras de plástico. Para aquellos que sepan disfrutar con la competición aséptica que proporcionan los robots y les guste una buena trifulca. Sin olvidar que es un deporte y a la vez un juego de estrategia. Aconsejable si te asustas al ver un libro de reglas enorme o quieres sencillamente no complicarte y pasar las horas divirtiéndote. Si te pusiste en la piel de Acero Puro o siempre has querido manejar un Transformer entonces te encantará Iron League. 

Reglas sencillas, portentosas figuras, mecánica azarosa conseguida, apto para un público amplio.

Tablero y fichas calidad inferior y diseño pobre, libro de reglas descuidado, sistemas 3+ jugadores poco trabajados.