El domingo disfruté de una tarde estupenda rodeados de juegos de mesa en el café-pub Continental en Granada. Acompañado de El bazar de Iglesias y otros amigos.
El menú era bastante ambicioso. Empezamos con un café y unos deliciosos Roscos de Loja que se me ocurrió llevar para que degustaran los manjares de mi pueblo. Un legacy en toda regla con sólo 12 partidas.
El primero que sacamos fue Capitán Flint de Viravi. Un juego de cartas y rapidez en el que seremos piratas repartiéndonos el botín de nuestras capturas. Una mecánica interesante que combina reflejos y suerte, el momento que elijas para coger los tesoros será decisivo pues cada ronda se hará más suculenta su cantidad. Hasta que aparezcan los demás piratas y te arrebaten esos anillos o joyas que con tanto tesón has estado acumulando. Gracias a un par de jugosos botines me hice con la victoria sin necesidad (casi) de golpear al pobre loro.
El siguiente en salir fue La resistencia: Ávalon de Devir. Un juego de roles ocultos en el que hay que completar varias misiones mientras los esbirros de Mordred tratarán de sabotearlas. Tuve la "fortuna" de ser malo en ambas partidas y me lo pasé genial tratando de engatusarlos. Podéis imaginar mi éxito pues ambas victorias se fueron para el lado de los buenos, fue un error para las fuerzas oscuras el contratarme. Muy divertido y con unas posibilidades enormes, me ha dejado con ganas de repetir.
Después le llegó el turno a La posada sangrienta de Asmodee. Un juego de cartas donde tendremos que conseguir la mayor cantidad posible de dinero matando y enterrando a nuestros huéspedes. Ha sido mi segunda partida y las sensaciones han ido mejorando, conseguí la victoria con 66 monedas gracias a un ambicioso asesinato en el último turno. Incluso con cuatro personas y siendo la primera partida de la mayoría no se hizo lento ni pesado. Tiene un mecanismo muy sencillo que será complicado de optimizar.
Por último, viendo la ausencia de tiempo para juegos más largos propuse Mix It de Brain Picnic. Un juego de cartas donde tendremos que completar nuestro monstruo colocando las partes correspondientes en los modelos que habrá sobre la mesa. El problema será que los demás tendrán su propio objetivo y sólo hay espacio para dos monstruos al mismo tiempo. Jugamos dos partidas: una a 3 y otra a 5 puntos pues la primera se hizo demasiado corta. Sencillo y rápido, deja con muy buen sabor de boca.
Y así terminó otro día redondo donde los juegos de cartas tuvieron un papel protagonista. Esperamos repetir pronto porque se quedaron muchos otros en el banquillo.
PD: Al final sólo quedaron 4 roscos.
Uff, otro poniéndome los dientes largos con el Avalon. Qué ganas de probarlo por dios! XDDD
ResponderEliminarEs un juego que no tiene desperdicio, mucho más redondo que otros juegos similares como los hombres lobo de Castronegro. Hay ciertos detalles como el asesinato de Merlín (Merlín es la niña) que lo obligan a jugar encubierto es una genialidad. Gana bastante cuantos más personajes especiales incluyas. Aun así, para no dejarme llevar por el hype diré que es bastante dependiente del grupo, si no entienden la mecánica o alguien no quiere jugar puede destrozar la partida. El límite de 5+ para jugar hace que sea complicado de sacar.
ResponderEliminarYo lo tenía en mi wishlist desde hace años. Después de jugar una vez a la Resistencia tenía claro que lo quería pero prefería la temática Artúrica.