El portal de Molthar

Nombre: El portal de Molthar
Diseñador: Johannes Schmidauer-König
Editado por: Mercurio
Edición: Primera edición en español 2015
Jugadores: 2 - 5
Edad: 10+
Tiempo: 45´
Dependencia idiomática: No, sólo reglas.
Fundas: Si. Necesitaréis 110 Fundas Quimera (57.5 mm x 89 mm) en Zacatrus
Precio aproximado: 13€

Entra a través del portal hasta el mundo de Molthar. Colecciona perlas mágicas y recluta un grupo de seres fantásticos con habilidades increíbles, traídos desde los cuentos de tu infancia para convertirte en el verdadero elegido. Reseñamos el juego de cartas El portal de Molthar editado en España por Mercurio

Primero vamos a conocer los dos tipos de cartas que encontramos:
  1. Las cartas de perlas, contienen un número del 1 al 8 y servirán como pago para activar a los personajes. Puedes acumular hasta un máximo de cinco en la mano.
  2. Las cartas de personajes, necesitarán perlas para activarse y así otorgar: puntos de victoria, habilidades azules (cada turno) o rojas (un sólo uso) y/o diamantes.

Antes de empezar, repartiremos los tableros para invocar a los personajes y colocaremos ambos montones de cartas en el centro de la mesa dejando bocarriba cuatro perlas y dos personajes. Por turnos, cada uno dispondrá de tres acciones a elegir entre las siguientes cuatro:
  1. Coger una perla descubierta o la primera de la pila.
  2. Reemplazar las cuatro perlas, si no os interesa ninguna.
  3. Llevar a un personaje hasta vuestro portal, reservándolo para un futuro cercano.
  4. Activar uno de vuestros personajes, pagando el coste indicado en la parte superior.
Cuando alguien alcance 12 puntos se jugará una última ronda y se acabará la partida proclamando como vencedor al que haya conseguido más. 

Al activar al personaje podréis beneficiaros de su habilidad. Sus efectos son numerosos y muy dispares, pudiendo manifestarse como: acciones extra, perlas inagotables o ayudas para controlar la mano o la mesa. Sus resultados vienen expresados con símbolos, pero son tantos que necesitarás las reglas a tu lado para consultarlos en las primeras partidas. A pesar de ello, una vez acostumbrados a la mecánica resultan intuitivos. La coordinación entre las habilidades y los puntos será clave para lograr la victoria y dará una motivación extra para buscar las combinaciones más difíciles.


El trabajo artístico realizado en El portal de Molthar está en sintonía con la temática. Por un lado, tenemos las perlas, cuyo diseño varía en cada número dotándolas de cierta personalidad. En el otro lado, tendremos a los personajes que forman un elenco heterogéneo conocido por todos: hobbits de la Comarca, El gato con botas, Aslan el león de Narnia, Hada madrina, Blancanieves, Fújur de la Historia interminable y hasta el mismísimo Conan entre otros muchos. Las primeras partidas pasarán entre exclamaciones de asombro cada vez que los reconozcáis ya que, no son los originales a los que estamos acostumbrados sino interpretaciones adecuadamente caracterizadas. En general, un diseño que encandila a niños y mayores.

La interacción es sutil. Durante tu turno tendrás que priorizar y confiar en que no te quiten lo que necesites, además de vigilar algunas habilidades que active el enemigo. Con dos o tres jugadores puedes arriesgar más y tener cierto control sobre lo que hacen los demás. En contraposición, con cuatro o cinco rivales la competición por los mejores personajes se vuelve más intensa, desaparece la sensación de control y el panorama encima de la mesa cambia radicalmente cada ronda. Aun así, no será algo problemático pues aunque te arrebaten al Capitán Garfio siempre podrás activar con las mismas perlas a Cerbero, Bilbo, uno de los enanos o incluso a Groot. Lo que se volverá incontrolable serán las habilidades, habrá muchas en la mesa activándose cada turno y alguna de ellas podrían afectar a tu mano o a tu tablero obligándote a reorganizar la estrategia a corto plazo. El portal de Molthar funciona correctamente independientemente de los participantes, la diferencia será el control de las cartas sobre la mesa.



Una partida normal dura en torno a 45 minutos. Las partidas no se hacen largas porque se aprende rápido y no hay que pensar mucho, será ideal para jugar con tu pareja y no dispones de mucho tiempo. Se extiende algo más a cuatro o cinco jugadores si es su primera vez, pero una vez que todos saben se vuelve muy fluido. También puede excederse cuando la tensión en los últimos turnos es tan intensa que obliga a ralentizar el ritmo para sacar el máximo de puntos posibles. 

Los componentes cumplen adecuadamente con su función. El punto fuerte es la caja, pequeña y manejable, perfecta para llevársela a cualquier sitio. Un gran trabajo de compresión. En total contiene 110 cartas, con un gramaje y un tacto correctos. Las cartas encajan con fundas al milímetro, serán recomendables para mantenerlas en buen estado. El punto negativo se lo llevan los "tableros" de papel que no llegan a ser siquiera de cartulina. Es comprensible su calidad debido a que sólo sirven para marcar los dos huecos disponibles y señalar quién es el jugador inicial. Son elementos innecesarios que podrían haber aportado la nota de calidad haciéndolos en cartón, aunque esto supondría un aumento en el costo final.


El precio ronda los 13 euros, apto para los compradores más modestos. Lo mejor es que se amortiza desde la primera partida ya que usaremos la mayoría de las cartas y tiene suficientes personajes diferentes para que no se haga repetitivo.

Su temática es muy original y atractiva, en Molthar han cobrado vida los personajes fantásticos que conoces de libros y películas. En teoría tiene un potencial enorme, sin embargo, en la práctica está pillado con pinzas. Las habilidades no están relacionadas con los personajes. No tienes la sensación de reclutarlos sino de usarlos, las ilustraciones desaparecen al acumularlos para contabilizar los puntos y el portal no es más que un banquillo donde esperan a ser invocados. Aun así, nunca desconectas del todo y aunque no necesites a Dumbledore lo cogerás simplemente por el cariño especial que le tienes.


El portal de Molthar es muy entretenido, no es agotador ni repetitivo. Cumple en todos los aspectos y funciona correctamente independientemente de la circunstancias. Aun así, tampoco destaca en nada, las ilustraciones son buenas pero no brillantes, la mecánica funciona pero no apasiona, los componentes son prácticos pero no impresionan. Siempre será una opción a barajar cuando tengas que elegir un juego pero pocas veces será tu preferencia. Por todas estas observaciones la nota que ha conseguido es de:
Les recomiendo este juego a nuestros lectores con colecciones modestas debido a su versatilidad, a aquellos jugadores menos experimentados por su sencillez y entretenimiento, y a los más experimentados porque tocará su fibra sensible y sabrán encontrarle el punto a la conexión entre las habilidades. Servirá para preparar el terreno antes de una partida más intensa o cuando os apetezca desconectar y pasar un rato divertido sin excesivas explicaciones.

¡Conviértete en un héroe de leyenda en las tierras de Molthar!
Juego sencillo y flexible, ilustraciones adecuadas, precio asequible, caja compacta.
No destaca, poca interacción.

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